¿Fertilizantes orgánicos o minerales? Diferencias y Aplicaciones

¿Fertilizantes orgánicos o minerales? Diferencias y Aplicaciones

La posición de la sociedad con respecto al consumo de marihuana y su uso en tratamientos medicinales se ha ido flexibilizando, principalmente porque se ha demostrado que puede ser efectiva en el tratamiento de diferentes enfermedades. En Chile, por ejemplo, la Cámara de Diputados aprobó la Ley del Cultivo Seguro en mayo del presente, la cual despenaliza el uso medicinal del cannabis y modifica el código sanitario al incluir el autocultivo y los productos artesanales como vía de acceso válida a la planta o los derivados de la misma.

En ese contexto, las plantaciones de cannabis cada día son más populares. Tal vez tú seas uno de los que ya tiene una propia o está pensando en iniciarla pronto. Al respecto, debes saber que los fertilizantes juegan un papel fundamental, pues proveen los nutrientes que las plantas necesitan para vivir, optimizan su producción y mejoran la baja fertilidad de los suelos.

Teniendo en cuenta esto, debes elegir el fertilizante que usarás en tus plantas. Para el cultivo de cannabis puedes valerte de orgánicos o minerales, pero ¿cuál es mejor? Toma nota:

¿Qué son los fertilizantes orgánicos?

Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, 'orgánico' es un términode etiquetado que denota productos producidos bajo la autoridad de la Ley de Producción de Alimentos Orgánicos. Las principales pautas para la producción orgánica son utilizar materiales y prácticas que mejoren el equilibrio ecológico de los sistemas naturales y que integren las partes del sistema agrícola en un todo ecológico”.

Los fertilizantes o abonos orgánicos para el cannabis proceden de fuentes orgánicas vivas, como excrementos de animales, otras plantas, polvo de roca e incluso yeso.

Ventajas de los fertilizantes orgánicos

En comparación con los abonos químicos, los fertilizantes orgánicos suelen liberarse de forma más gradual y son regulados por los microorganismos que viven en el suelo. Esto reduce drásticamente las posibilidades de que el cultivador queme o fertilice en exceso las plantas. Es decir, que los nutrientes de este tipo pueden ser un poco más seguros, especialmente para aquellas personas que aún no tienen experiencia en cultivar marihuana y, por lo tanto, no tienen en conocimiento para detectar oportunamente la sobrefertilización de un cultivo.

Sumado a ello, estos fertilizantes también le aportan otros beneficios a tu cultivo:

  • En el suelo viven varios organismos microscópicos -como como bacterias, virus y hongos- que crean relaciones simbióticas (de mutua ayuda) con tus plantas. Entre los beneficios que estos microrganismos le aportan al cultivo están el aumentar la disponibilidad de nutrientes en el suelo, cambiar las señales de las hormonas y repeler y/o eliminar aquellos organismos patógenos que pueden acabar con la plantación de cannabis. Los nutrientes orgánicos tienen un efecto benéfico para dichos microorganismos, es decir, potencian su crecimiento, contribuyendo así a un muy buen desarrollo de la plantación.

  • Al potenciar el crecimiento de estos microorganismos mediante el abono orgánico, logras que se mantengan en el suelo y reduces las probabilidades de perderlos con el drenaje.

  • Son nutrientes renovables, más respetuosos con el medio ambiente.

  • Al cultivar orgánicamente, tu suelo mejora con el paso del tiempo, favoreciendo su reutilización durante muchas temporadas.

Desventajas de los fertilizantes orgánicos

Nada es perfecto. Al cultivar cannabis de forma orgánica también debes asumir ciertas desventajas. Entre las más relevantes se encuentran las siguientes:

  • Las plantas tardan más en absorber el abono, ya que el proceso dependerá de los microorganismos que descomponen los nutrientes. Eso hace que sea más difícil detectar carencias nutritivas en la plantación.

  • En los climas más fríos, estos microorganismos descomponen los nutrientes de forma más lenta, ralentizando aún más el proceso.

  • El cultivo orgánico no es una ciencia, es un arte difícil de gestionar. Si aplicas más de lo debido puedes sobre fertilizar las plantas, pero si agregas muy poco las puedes llevar a una carencia nutricional.

  • Las materias orgánicas pueden atraer a insectos y plagas, así como incrementar las probabilidades de aparición de hongos o algas perjudiciales.

  • Suelen ser más costosos que sus equivalentes sintéticos.

¿Qué son los fertilizantes sintéticos?

Los fertilizantes sintéticos son fabricados mediante procedimientos químicos en laboratorio. Estos le aportan a tu cultivo -de forma instantánea- los tres macronutrientes fundamentales para su desarrollo: Nitrógeno (N), Fósforo (P) y Potasio (K).

Sumado a ellos, estos fertilizantes contienen otros elementos benéficos para tu cultivo, como son calcio, magnesio, hierro o zinc, entre otros. Al aplicarlos, es importante revisar las concentraciones de cada nutriente, ya que las necesidades nutricionales de las plantas varían considerablemente de una fase de desarrollo a otra.

Ventajas de los fertilizantes sintéticos

Como los fertilizantes químicos tienen la ratio exacta de cada nutriente, puedes controlar con mayor precisión la cantidad que suministras a las plantas en sus diferentes etapas de desarrollo. Esto puede derivar en cosechas más grandes con un contenido de THC superior.

Adicionalmente, puedes encontrar en este abono otro tipo de ventajas:

  • Los abonos sintéticos no necesitan tiempo para degradarse y estarán disponibles para tus plantas de cannabis una vez los aplicas, sin necesidad de esperar a que los microorganismos entren a cumplir un papel en el proceso. Esta rápida absorción de los nutrientes te permite ver sus efectos sobre la salud los cultivos de forma instantánea, ayudándote así a corregir oportunamente las carencias nutricionales.

  • Se encuentran, prácticamente, en cualquier tienda y suelen ser un poco más baratos que los abonos orgánicos.

  • Tienen efectos mucho más predecibles que su contraparte orgánica.

Desventajas de los abonos sintéticos o minerales

  • El mismo hecho de que los fertilizantes sintéticos para el cultivo de marihuana ofrezcan tan rápida absorción aumenta los riesgos de sobrefertilización y quemaduras. En cierta forma, representan un riesgo para los cultivadores con menos experiencia.

  • Generan acumulaciones de sales en el suelo con el paso del tiempo, degradando su calidad.

  • No se fabrican con materias primas renovables. Sus componentes pueden generar daños en el medio ambiente, especialmente cuando realizas los drenajes del riego.


¿Es posible iniciar con un tipo de fertilizante y después cambiar?

Sí, es posible. Sin embargo, se trata de un proceso complejo que exige más que un cambio de tipo y marca de producto. De hecho, es importantes que busques asesoría para realizar una conversión gradual que no afecte el suelo y, posteriormente, el desarrollo nutricional de tus plantas.

¿Qué diferencias hay en el producto final?

Según los expertos, “Las plantas usan las formas elementales de nutrientes de la misma manera, independientemente de su origen. Algunos estudios de cultivos alimentarios han reportado un bache estadístico en presencia de fenoles en plantas alimentadas orgánicamente, pero de lo contrario no hay diferencia química. En Cannabis, la calidad mejora al enjuagar las plantas con agua corriente durante las últimas dos semanas para evitar que la planta absorba más nutrientes y permitir que los nutrientes existentes en la planta se incorporen y metabolicen antes de la cosecha. Este enjuague, junto con una buena cura, producirá Cannabis de muy alta calidad, independientemente del tipo de fertilizante utilizado”

La misma fuente señala que ha habido varios informes subjetivos de que el cannabis orgánico huele y sabe mejor, pero hasta que no incremente la investigación científica en este tema no se pueden lanzar aseveraciones objetivas sobre el tema.

Entonces, ¿cuál fertilizante elegir?

Ambos métodos son efectivos a la hora de cultivar marihuana y, según lo expuesto en el punto anterior, no existe una diferencia entre ellos claramente mensurable en la composición nutricional de los productos finales cuando se lavan abundantemente antes de la cosecha.

En todo caso, cuando no tienes experiencia en el cultivo de cannabis, puede ser fácil exagerar con ambos tipos de abono y dañar las plantas por exceso de fertilización.

Por lo tanto, el fertilizante a usar en tu plantación depende de tus preferencias. Es aconsejable que pruebes ambos métodos, midas los resultados, el trabajo y los recursos invertidos en cada uno. De esa manera, te resultará mucho más sencillo elegir el que más te convenga. En todo caso, es importante que estudies todo lo que puedas sobre la gestión de cultivos de marihuana e implementes buenas prácticas al respecto, y que la marca del producto elegido te garantice respaldo y óptima calidad.



Fuentes de información (URLs) (4)

royalqueenseeds.es/blog-por-que-los-microbios-del-suelo-son-clave-en-t…

royalqueenseeds.es/blog-fertilizantes-para-cultivar-marihuana-organico…

semillaslowcost.com/blog/que-es-un-abono-npk

florprohibida.com/blog/fertilizantes-abonos-marihua